 Redacción @todocircuitoweb | Google+ |
Marc Márquez y Dani Pedrosa completaron ayer un test privado de un día en el circuito de Jerez, en el sur de España. Durante la jornada, los pilotos del equipo Repsol Honda continuaron con el desarrollo de la Honda RC213V, después de las seis positivas jornadas de test oficiales que completaron en Sepang (Malasia) y Phillip Island (Australia), junto al resto de equipos de MotoGP.
El reglamento permite un máximo de cinco días de test privados al año a cada equipo de MotoGP, de modo que Márquez y Pedrosa decidieron no malgastar la jornada del viernes por culpa de la lluvia. Así, tras rodar únicamente el sábado, ambos pilotos tienen todavía cuatro jornadas de test por delante a lo largo del año.
El test de Jerez deja a Márquez dolorido tras irse al suelo a última hora del sábado, acabando con una luxación en su hombro derecho, una lesión que ya ha sufrido en alguna otra ocasión, la última en el GP de Aragón 2016. "Hoy ha sido un día productivo, porque hemos podido completar muchas vueltas y trabajar bien con nuestra moto", contaba Márquez, que según cuenta el periodista Germán García de Motorsport.com, no volvió a subirse a su moto tras la caída.
"Hemos hecho la mayoría de pruebas que teníamos planeadas, y eso es bueno. Me he caído por la tarde y me he dislocado el hombro, pero por suerte no ha sido nada serio. Ahora tendremos algo de tiempo para descansar en casa y para prepararnos para el siguiente test, en Catar", finaliza el de Cervera, que dispondrá de dos semanas para recuperarse del hombro antes del último test IRTA del año del 10 al 12 de marzo.
